Misterio en el Delta: hallan a una pareja muerta en un yate

Los encontraron sin vida en un barco amarrado frente a un restaurante en un arroyo del Tigre. No había signos de violencia en la embarcación.

Una mujer de 50 años y un hombre de 58 fueron hallados muertos en las últimas horas en un yate amarrado frente a un restaurante en un arroyo del Tigre. Las fuentes que investigan el caso aseguraron que está casi confirmado que las muertes se produjeron por la inhalación de monóxido de carbono.

Los cuerpos fueron encontrados anoche en el yate "Le Monique", que estaba amarrado en el arroyo Pajarito, cerca del muelle del restaurante Don Gobbi. Las víctimas fueron identificadas como Domingo Maccarone y Sandra Levit.

"Ayer a las 21.15 aproximadamente recibimos una llamada en el 106, de emergencias náuticas, manifestando que había dos personas en el interior de una embarcación aparentemente fallecidas. Inmediatamente personal de esta Prefectura fue al lugar y corroboró que había dos personas tiradas en el piso y sin vida", detalló Jorge González, prefecto principal de San Fernando. 

Desde la Prefectura Naval indicaron que las víctimas no presentaban signos de violencia, ni elementos que hagan suponer que hubo una pelea. "Las causas de muerte las van a detallar las pericias que se realizaron esta madrugada, pero un perito experimentado que estuvo en el lugar aseguró que sería por la inhalación de monóxido de carbono", señaló González. La Policía negó que hubiera una tercera víctima, como en un principio había trascendido.

El prefecto también contó que el yate estaba herméticamente cerrado y que los primeros en ingresar tuvieron que hacerlo mediante una ventana: "La mujer estaba acostada en la cama, mientras que el hombre se encontraba tirado en el piso, entre la cama y el baño", aseguró. Algunos creen que Maccarone se dio cuenta de que algo pasaba e intentó abrir algunas de las ventanas, pero no llegó y se desvaneció.

González contó además que la pareja era conocida por los dueños de Don Gobbi, ya que habían ido "en dos o tres oportunidades" a comer a ese restaurante. El yate se amarró el sábado a la tarde con la intención de pasar el fin de semana y las dos personas "comieron a la noche, apagaron las luces y al otro día no se los vio más". Fue a un empleado de la casa de comidas a quien le llamó la atención la permanencia de la embarcación, por lo que se acercó para ver si tenía algún inconveniente y halló los cuerpos de sus dos ocupantes.

Otras fuentes que participan de la investigación contaron que el yate estaba herméticamente cerrado  ( GENTILEZA  TELAM )